Dentro de las habilidades de toda persona, hombres, mujeres, adolescentes y niños, los múltiples estudios que existen al respecto para el manejo de las emociones, es hoy por hoy una necesidad cada vez más latente y tristemente en la cual, el sistema de educación en las escuelas menos se enseñan. Se ha comprobado que la habilidad de gestionar o manejar las emociones está más directamente relacionado al éxito que a el famoso coeficiente intelectual o IQ por sus siglas en inglés.
Así que de manera breve y resumida te presento las herramientas y técnicas para poder aplicarlas, tener así un manejo de emociones asertivo y sobre todo que evite llevarte a el rompimiento de relaciones laborales. Que encuentres en estas prácticas la expansión de tu ser en el ámbito en el que te desarrolles y si estás en el ámbito empresarial, del emprendimiento o colabores en una empresa, te invito a que no dejes de leer esta colaboración y que sea de utilidad la puesta en práctica de estas técnicas.
- Ponle nombre a tu emoción: Recuerda que sólo hay cuatro emociones básicas y si partimos de ese principio, comprenderemos que de ellas se crean todas las demás: alegría, tristeza, enfado y miedo (aunque algunos autores añaden sorpresa y angustia). Es aquí donde te invito a que vuelvas a ver la película “Intensamente” de Pixar y Disney, en ella podrás ver como son estas cuatro emociones básicas y como tienen una utilidad importante, sobre todo en la supervivencia.
Así que si tienes una emoción, ponle nombre, no solo digas es “tristeza” lo que siento, sino debes de ser lo más especifico posible. Por ejemplo, puedes decir, me siento “decepcionado, compungido, melancólico o herido” esto, para que primero tú sepas lo que estas sintiendo y por consiguiente cómo gestionar este sentir.
- Se consiente de lo que pasa en tu interior: Para poder gestionar la emoción es común que los especialistas te digan que tienes que crear conciencia y con ello, eventualmente quedas igual. Conciencia es reconocer en ti y ser objetivo en la forma de como te conoces, cómo mides tus fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades. Así mismo conocer tu carácter, estados de ánimo y por supuesto emociones, es decir, haz también en ti un FODA (Fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas) para que puedas calibrar la emoción y con ello actuar asertivamente en la gestión de la emoción.
Una vez que identificas la emoción y que generaste la conciencia, baja la velocidad de tu ritmo de pensamientos, y busca canalizar esa energía en positivo.
- Tu cuerpo, reflejo de tu emoción: Aprende a descifrar lo que tu cuerpo dice y tú reprimes, ocultas o ignoras, observa y siente tu cuerpo para que descubras qué sientes realmente. Observa, por ejemplo, como hay gente que al enojarse se cruza de brazos porque comenzará a sentirse agredido. Si eres capaz de relacionar este tipo de cambios en el lenguaje corporal con tus emociones serás capaz de detectarlas mucho antes.
Observa y siente con detenimiento, no sólo se trata de cambios en las posturas, ya que las emociones también se manifestarán en cambios fisiológicos automáticos como enrojecimiento de tu rostro cuando te enojas o una opresión en el pecho cuando estás triste. Pon en práctica la observación y sentir de tu cuerpo y verás como éste hablará y te dirá mucho sobre tus emociones y así será un buen inicio para gestionarlas.
- La motivación o tus metas pueden ayudarte a gestionar tus emociones: La visualización en el objetivo que quieras lograr es una excelente herramienta para que puedas entonces visualizarte en el logo de la meta y por lo tanto te ayudará para alcanzar las actitudes, hábitos y control para lograrlo, pues te pone en perspectiva ante oportunidades y situaciones de vida.
Visualiza tus metas. Imagina y determina donde quieres estar en algunos años, establece qué te gusta y qué tendrás que hacer para llegar a ello, eso será una excelente herramienta que te ayudará a generar una actitud energética y positiva sobre ti mismo y tus objetivos.
Solo te pido un favor, sé realista. Comprende que es un proceso y que llegarás a tus objetivos. Apóyate a ti mismo en tus nuevos objetivos, paso a paso, una vez que alcances las primeras metas, generarás esa confianza en ti mismo para llegar más allá. Sé claro y piensa en positivo, determina que los problemas y contratiempos son oportunidades de aprendizaje continúo.
- La empatía, tu gran aliada: Comprender las emociones de otros, ser sabedor que todos tienen sentimientos, miedos, deseos, metas y problemas. Y para ser empático debes permitir que sus experiencias se mezclen con las tuyas y responder de una manera emocionalmente apropiada. Estos son algunas de las prácticas para generar empatía con las personas y que te serán útiles para desarrollar tu inteligencia emocional:
Escucha y comprende lo que está diciendo el otro
Deja a un lado tus prejuicios, escepticismo y otros problemas
Crea una actitud accesible
Atrae a otros con una buena personalidad
Ponte en los zapatos del otro
Obtén un poco de perspectiva de lo que los demás pueden sentir y pensar desde su experiencia
Ábrete a otras personas y por último
Escucha y conecta con las personas que tienes alrededor.
Deseo de corazón que estas cinco herramientas te sean de utilidad para la gestión y/o manejo de las emociones. Si aún crees que con estas herramientas no son suficientes para poder tener éxito en tus relaciones, te pido que accedas a buscar ayuda en internet, hay muchos tutoriales, cursos sin costo, información y demás artículos que pueden ayudarte a acrecentar tu acervo cultural al respecto y sobre todo que tus relaciones interpersonales, el éxito al que aspiras y la plenitud en tu vida se pueda ir construyendo de manera exitosa.