Saber si estamos absorbiendo los nutrientes de los alimentos como de los suplementos es una pregunta frecuente en la consulta para la cual la respuesta es “depende”.
Sí, depende de varias situaciones, desde cómo está el estómago que los recibe en ese momento, cómo se están consumiendo y cocinando los alimentos y en el caso de suplementos, tiene que ver mucho la combinación de unos con otros, la manera en cómo se fabricaron, etc. La absorción, es solo un aspecto de la biodisponibilidad y depende los factores ya mencionados y de otros tantos.
Por mencionar un ejemplo, cuando los alimentos que contienen hierro se comen en una comida que también proporciona vitamina C, como puede ser algún cítrico por ejemplo, esta vitamina mejorará la absorción del hierro. Por lo mismo, cuando se presenta algún caso de anemia, se recomienda mucho el consumo de alimentos ricos en esta vitamina.
Por el otro lado, si comemos alimentos ricos en hierro acompañados de algún té o bebida láctea, estas bebidas inhibirán la absorción del hierro por su contenido en oxalatos. La condición del ácido estomacal juega también un papel importante en la absorción del hierro ya que a medida que se envejece bajan los niveles de ácido y también algunos medicamentos pueden inhibir la producción del mismo.
En el caso de las vitaminas del grupo B, estas son mejor absorbidas en presencia de grasa dietética y vitamina C. Información a tomar en cuenta a la hora de cocinar. Es importante saber también que no en todos los vegetales la absorción de sus vitaminas y minerales será mejor cuando están crudos, es decir, en algunas verduras cocinarlas en realidad aumenta sus niveles de antioxidantes. Como ejemplo tenemos a las zanahorias y los tomates cocidos, los cuales tienen una mayor disponibilidad de antioxidantes que cuando se consumen crudos. Con otras verduras sucede lo contrario, cuando se someten a mucho calor se tiende a reducir el contenido de nutrientes, como pasa en un caldo de verduras, y más si se calienta en varias ocasiones.
El consumo de alcohol y diuréticos como por ejemplo el café, pueden afectar al número de enzimas digestivas así como también dañar algunas células dentro del estómago, haciendo difícil digerir algunos nutrientes. El alcohol también afecta la absorción de algunas vitaminas como las del grupo B y el zinc. El café por su lado interfiere con la absorción de calcio, hierro, magnesio y algunas vitaminas del grupo B.
Otro factor a tomar en cuenta es el estrés el cual afecta a la digestión, esto sucede porque con estrés puede venir una fatiga adrenal que afecte la absorción de las vitaminas del grupo B, vitamina C y magnesio.
En cuestión de suplementación, la biodisponibilidad de los micronutrientes de estos puede variar mucho dependiendo de cómo se hace la tableta o cápsula y cómo se almacenó.
Una de las mejores maneras de asegurarnos que estamos obteniendo todos los nutrientes que necesitamos es comiendo una dieta variada que incluya frutas, verduras, granos enteros, legumbres, grasas saludables y proteínas.
Si bien muchos alimentos de hoy en día han sufrido modificaciones y procesos que afectan su contenido nutricional, la recomendación es incluir alimentos menos procesados en su mayoría como son los vegetales, consumir grasas saludables como el aguacate y el aceite de oliva. Consumir especias ya sea como té o con alimentos que ayudan y combaten la inflamación que desencadena enfermedades.