Cuidados en niños y adolescentes en el calor extremo

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Dr. Ricardo Acosta

Pediatra Neonatólogo

Los niños y adolescentes son más susceptibles que los adultos de sufrir enfermedades relacionadas al calor. Por falta de precaución y de anticipación, ya empezamos a recibir niños y adolescentes en los servicios de urgencias con «golpe de calor» y deshidratación.


Comparto a continuación las medidas para evitar lo anterior:

a) Del niño o adolescente que va a participar en actividades deportivas: Bien descansado, SANO (hay medicamentos que aumentan las posibilidades de estos eventos), con ropa deportiva no oscura, ligera y que permita sudor libre. Hidratado perfectamente antes de iniciar el ejercicio.
b) Pedirles que reporten inmediatamente si se sienten mal durante el ejercicio: Cansados, con vómito, dolor de cabeza, calambres, mareo. 
c) Aclimatización previa: Esto es, no puede empezar a jugar al 100% inmediatamente, tienen que calentar ligeramente previo al evento. 
d) La hidratación OBLIGATORIA y preventiva durante el evento es de suma importancia: agua libre en eventos de menos de media hora o bebidas deportivas en más de este tiempo, frías, aproximadamente 500 mL por cada media hora. El entrenador o árbitro debe hacer pausas durante el partido cada 15-20 minutos para rehidratar.
e) Disminuír los tiempos del partido; reprogramar las horas del mismo. OJO: Cambiar un partido en estos tiempos de 5 pm a 7 pm es una tontería, pues el calor y la intensidad de la luz es la misma. Varios de los casos esta semana fueron por golpes de calor a esta hora (7 pm.) O se suspende o se programa por la mañana o después de las 8 pm.
f) Deportes que requieran de mucha ropa o protectores (futbol americano): Deben hacerse sin ellos de 10 am a 8 pm.
g) Los entrenadores DEBEN tener conocimiento de los signos y síntomas tempranos del golpe de calor y tomar las medidas preventivas para actuar inmediatamente. Esto incluye planes de cada escuela para transportar con prontitud al atleta que esté con datos sugestivos. Esperarse a «ver si mejora» no es definitivamente una buena idea.
h) A menor edad, mayores riesgos. 
i) Sugiero que padres y entrenadores tengan una plática previa en este verano. Una dosis de prevención vale mil de curación.