Los triglicéridos son un tipo de grasa que se encuentran en la sangre. Estas sustancias se derivan tanto de la grasa que trae la comida así como de los hidratos de carbono (carbohidratos) contenidos en la misma.
Cuando las calorías consumidas no se usan inmediatamente, se convierten en triglicéridos y se almacenan en células de grasa. Las hormonas juegan un papel importante regulando su uso de acuerdo a las necesidades energéticas.
Los niveles normales de triglicéridos se consideran por debajo de 150 miligramos por decilitro (mg/dL), y por arriba de 200 mg/dL se consideran altos.
Presentar niveles altos de triglicéridos puede tener un origen genético y estar relacionado con otras enfermedades como obesidad y diabetes no controlada, sin embargo, el impacto de la dieta puede tener mayor peso que lo anterior.
Los hidratos de carbono (carbohidratos) en la dieta es el principal factor que afecta a los triglicéridos, especialmente aquellos de fácil digestión (lo de carga glicémica alta). Lo mismo sucede con las bebidas alcohólicas, aún en pequeñas cantidades los elevan. En muchas personas estos alimentos elevan los niveles de insulina, y la insulina tiene un impacto en la síntesis y almacenamiento de grasa.
Los niveles altos de triglicéridos suelen acompañarse de tener niveles bajos del colesterol “bueno” (HDL, o colesterol de alta densidad), así como el tener un impacto en los niveles altos de presión sanguínea y presentar obesidad central (abdominal). Lo anterior son considerados como marcadores del síndrome metabólico y de resistencia a la insulina, condiciones de riesgo para la salud cardiaca y diabetes tipo 2.
Si quieres conocer tus niveles de triglicéridos puedes acudir a un laboratorio y solicitar un perfil de lípidos que además te proporcionará otros datos como son el colesterol total, los tipos de colesterol y el índice aterogénico, que permite identificar si hay riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Además, los triglicéridos altos pueden endurecer arterias o engrosar las paredes arteriales (arterioesclerosis), situaciones que aumentan el riesgo de sufrir accidente cerebrovascular, ataque cardíaco y cardiopatías. Los triglicéridos extremadamente altos también pueden causar inflamación aguda del páncreas (pancreatitis).
Existen medicamentos que ayudan a reducir los niveles de triglicéridos, sin embargo, estos se recomiendan cuando las modificaciones en las pautas alimenticias y estilo de vida no logran disminuirlos. Comparto algunas recomendaciones para mantener niveles saludables de triglicéridos así como para disminuirlos:
- Consumir alimentos bajos en grasas saturadas (encontradas en productos de origen animal) y elije grasas saludables como son alimentos con buen contenido de OMEGA-3 (atún sarinas, salmón) o suplementarlo y consumir alimentos con buen aporte de grasa de origen vegetal como son que encontramos en el aguacate, aceite de olivo por ejemplo.
- Elegir hidratos de carbono con baja carga glicémica y altos en fibra. Evitar azúcares, refrescos, alimentos hechos con harina refinada, abusar de panes, tortillas, etc.
- Limitar consumo de bebidas alcohólicas. Si presentan triglicéridos altos, es mejor evitarla por un tiempo.
- Ejercitarse de manera regular (5-7 días a la semana), por lo menos 30 minutos. Además de reducir los triglicéridos, ayuda aumentar el colesterol bueno (HDL).