Estamos por comenzar un nuevo ciclo escolar y, para todos aquellos que somos papás, es muy importante retomar este tema y no olvidar el papel tan importante que jugamos en la educación de nuestros hijos.
Hoy en día vivimos de prisa y corriendo, tratando de cumplir con muchos compromisos, ya sea laborales o sociales, por lo que es muy fácil perder nuestro objetivo de ser papás presentes en todo momento. Esto implica cosas tan sencillas como dejar a un lado el ordenador o tu celular, darle ese tiempo de calidad a tus hijos, chicos y grandes.
Estos meses de nuevos comienzos son el momento perfecto para reflexionar y analizar qué tan presente estás en la vida de tus hijos, ya que viven bajo el mismo techo y no sabes si hoy tuvo un evento que, aunque te hayan dicho que no importaba tu asistencia, te puedo asegurar que en el fondo de su corazón querían verte ahí.
Es muy importante tener una relación afectuosa e incondicional, más allá de proveerlos económicamente, ser partícipes y actores en el cuidado diario de la crianza con acciones que se noten. Aquí te menciono varios consejos que espero te sirvan para lograr cambios en tu dinámica familiar:
- Aprende a escucharlos activamente, míralos directamente a los ojos y deja a un lado todo lo que estés haciendo. Ponles atención. Nunca minimices lo que estén platicándote.
- Aunque a veces nos abruma leer los chats del salón de las mamas, es importante que, como papás, estén informados de lo que pasa y las actividades que se tendrán en sus salones. Descarta lo que no te sirva, pero es una herramienta para recordar los futuros eventos y no perdernos de nada. Y por favor, AGÉNDALO.
- Asiste a todas las actividades escolares, fiestas, partidos, presentaciones, etc., que sean requeridos. Es donde podrás darte cuenta de realmente cómo actúa tu hijo en el medio donde se desenvuelve.
- Dedícales un tiempo especial a cada hijo, invitándolos a tomar una nieve, un café o su postre favorito, y plátiquen de todo ese ratito. Formarán un vínculo muy especial.
- Supervisa qué es lo que hacen y lo que ven, mientras vivan bajo tu responsabilidad no habrá privacidad, es mejor crear un clima de respeto y confianza, sabiendo que, como papás, estás al tanto de todas sus acciones.
- Siempre pregúntales a dónde van y con quién, a qué hora regresan y qué actividades harán. Procura que ellos siempre quieran invitar a sus amigos a casa para que tú puedas observar quiénes son y cómo se comportan sus amistades.
- Ser papá presente implica poner límites, disciplina y tener autoridad que nunca se pierda este respeto, porque una vez que no se cumple, podrás no tener buenos finales.
- Trata de hablarles sin criticarlos ni juzgarlos. Busca la mejor manera para que no tomen a mal un sabio consejo de tu parte como papás.
- Acéptalos y ámalos tal cual son. No son perfectos, pero con tu presencia amorosa estimularás su autoestima y querrán mejorar y superar sus fallas.
Los hijos con padres presentes crecen en un ambiente de aceptación, amor y respeto. Crecen seguros de sí mismos, por lo que saldrán triunfantes de los obstáculos que la vida les presente. Esto se notará en su rendimiento académico, y crecerán con mayor motivación. Desarrollarán un mejor plan de vida, involucrándose en actividades que los lleven a realizarse.
Crecer con valores no solo los ayudará a desarrollarse como personas, sino también a ser solidarios y empáticos con los demás. Papás, tenemos una poderosa influencia sobre nuestros hijos. No dejemos de lado todos estos puntos tan importantes y sigamos con ánimo, educando personitas que dejen huella en este mundo.
Para cualquier consultoría, pueden comunicarse conmigo a través de mi cuenta en Instagram @lorehdlavega.