¡Hola! Qué gusto volver a escribir para esta querida revista de Torreón. Cada vez que me siento a compartir una recomendación contigo, siento que algo se acomoda dentro de mí. Escribir aquí me conecta con partes de mí que a veces no tienen voz, y me llena de gratitud poder usar este espacio para conversar contigo, que estás del otro lado leyendo.
Hoy quiero hablarte de un podcast que me ha tocado profundamente: “El Podcast de Marco Antonio Regil”. Tal vez lo recuerdes de aquellos años dorados de la televisión mexicana, cuando su sonrisa franca y su energía contagiosa nos acompañaban en programas como Atínale al Precio (dato curioso: mi mamá fue concursante, ¡y todavía lo recuerda con emoción!).
Esa chispa que lo hacía tan cercano sigue viva, pero ahora la comparte desde otro lugar: más introspectivo, más consciente, pero igual de auténtico.
Marco tiene una forma muy suya de acercarse a sus invitados. Pregunta con una curiosidad genuina, sin miedo, con el corazón abierto y con mucho sentido del humor. No hay poses. Solo hay presencia y un deseo sincero de entender, compartir y crecer juntos. Eso se nota y se agradece.
Su camino ha sido todo menos lineal: de conductor de programas icónicos, pasó a ser conferencista, guía espiritual y ahora podcaster. Cada etapa lo ha transformado, pero nunca ha dejado de ser él. Su historia es un ejemplo de cómo podemos reinventarnos sin perder nuestra esencia.
Desde 2013 ha creado más de 380 episodios semanales —¡una constancia que inspira!— tocando temas diversos: emociones, espiritualidad, cuerpo, mente, relaciones, hábitos… Y aunque el contenido varía, hay algo que siempre está presente: su manera humana de conversar.
Entrevista a muchas personas muy interesantes, entre ellas quiero destacar a Nidia Chiaraviglio y Nirdosh Kohra, quienes me dejaron reflexionando profundamente. Aprovecho este artículo para regalarte 5 pasos que comparte el Dr. Nirdosh en uno de los episodios más valiosos que grabó con Marco, titulado: “Ansiedad, estrés, mente y cuerpo”.
Estos pasos pueden ayudarte a lidiar con tus emociones cuando alguien “presiona un botón” que activa una reacción emocional en ti:
- Me detengo.
- Lo nombro de forma simple: “Estoy en una reacción emocional”.
- Reconozco que necesito tiempo y espacio para procesarlo, y digo: “Ahorita regreso”. (Porque en ese momento no es posible lidiar con la persona que lo activó; lo que se activa es una emoción del pasado, que me saca del presente).
- Me retraigo y tomo espacio. Me muevo para mover la energía. No se puede resolver desde la mente o racionalizarlo; es algo alojado en el cuerpo, que necesita liberarse físicamente. (A mí me encanta bailar como si nadie me estuviera viendo). Cuando lo haces en el momento, se abre un portal hacia el pasado, una oportunidad increíble para liberar y sentir aquello que no pudiste en su momento.
- Sabes que ya se liberó porque lo sientes físicamente. Desde ese estado, puedes volver con la persona que te “triguereó” y expresar cómo te sentiste, desde ti. Si te permites un momento de silencio, probablemente emerja el recuerdo de tu pasado donde se instaló esa herida. Ese instante puede abrir paso a la autocompasión y al amor por tu historia. Incluso, puede acercarte más a esa persona y permitir que crezcan juntos a través de esta experiencia.
Espero que estas herramientas te sean útiles en esos momentos desafiantes. No solo pueden transformar tus relaciones: también pueden traer armonía, coherencia, bienestar general y salud física.
Si esto resuena contigo, te invito a escuchar el episodio completo.
En un mundo donde muchas veces todo parece forzado o superficial, el espacio que ha creado Marco se siente como un respiro. Hay algo en su voz, en su forma de mirar al otro, que reconforta. Escucharlo es como tomar un cafecito con alguien que realmente quiere estar ahí, contigo, en esa conversación.
Así que, si estás buscando un podcast que te acompañe de verdad, que te deje pensando, sintiendo y reconectando, este puede ser una hermosa puerta de entrada.
Gracias por leerme una vez más y a Se Balance por darme este espacio para conectar conmigo a través de la escritura y el compartir. Y gracias, Marco —aunque tal vez nunca leas esto— por tu autenticidad, tu luz y tu capacidad de evolucionar sin perder la calidez que siempre te ha caracterizado. Escucharte es volver a lo simple, a lo humano. Por eso, lo recomiendo con todo mi corazón.