Las mermeladas son un gozo para el alma y un apapacho para el corazón, pero está que te voy a compartir lo es de manera literal, gracias a los antioxidantes que tienen las berries y todas las propiedades que tiene la chía. Además que no tiene nada de azúcar, toda su dulzura y ese toque acidito viene de la fruta y con ese punch a naranja que te va a sorprender. Úsala con lo que mas te guste.
Ingredientes
2 tazas de berries congeladas
2 cucharadas de agua
Jugo de un limón
Ralladura de una naranja
3 cucharadas de monk fruit
1/4 taza de semillas de chía
Procedimiento
En una ollita poner las berries con el agua y el jugo del limón, tapadas a que suelten el jugo un poco.
Agregar el monk fruit y la ralladura de naranja y seguir cocinando por un rato más a que ablanden.
Moler a la consistencia deseada con la Braun o machacar de mano, agregar la chía y dejar hervir hasta que espese.
Guárdala en un frasco de vidrio en el refrigerador.