Su aroma es refrescante, da vigor y fortalece. Tiene una larga historia de uso en saunas, baños de vapor y masajes para los músculos adoloridos asociados al ejercicio intenso. Los indios Lakota lo usaban para fortalecer su habilidad para comunicarse con el Gran Espíritu.

Es antiespasmódico, antiinfeccioso, antiparasitario, antiséptico, antiinflamatorio, tónico general, estimula el timo y tiene un comportamiento similar a la cortisona y a las hormonas. Se puede usar en casos de artritis, cándida, hipertiroidismo, depresión del sistema inmune, prostatitis y reumatismo.

También puede ser beneficioso para el dolor de huesos, los desequilibrios glandulares, dolor de articulaciones y ciática. Puede estimular la glándula pineal, el timo y las suprarrenales. 

Ayuda a abrir y liberar bloqueos emocionales provocando un sentimiento de equilibrio, de seguridad y de paz. 

Ayuda con las alergias, cáncer, artritis, reumatismo, dolores musculares, migraña, ciática, infecciones respiratorias, sinusitis, cortadas, raspones, irritaciones de la piel; desbloqueo de traumas emocionales o estrés post-traumático, estrés, ansiedad y depresión. 

La Picea Azul de Idaho es el aceite esencial con la frecuencia mas alta, 580 MHz, te conecta a la tierra y da una sensación de profunda paz y seguridad. Nos ayuda a abrir nuestro corazón al proporcionarnos una sensación de seguridad y confianza en lo que somos. Trae paz a la mente y relaja el cuerpo. Sus influencias aromáticas también ayudan a abrir y liberar los bloqueos emocionales muy profundos.