Hoy quiero compartir con ustedes algo muy breve que escribí hace un tiempo, como parte de una tarea en un curso de escritura. A través de su mensaje, quiero agradecer nuevamente a esta revista por el tiempo que me ha permitido compartir con ustedes algunas herramientas, historias de vida y temas que, en mi proceso, han sido muy importantes.
Alguna vez me sentí perdida, sin entender nada, confundida entre las prisas de la vida, la economía y, obviamente, el estrés. Poco a poco, gracias a muchos maestros de vida que me enseñaron técnicas y me guiaron a trabajar en mí misma, logré volver a mi centro y recuperar mi salud mental.
Hoy en día, estar mentalmente sanos es una prioridad. Poner atención a lo que queremos y a lo que es importante en nuestra vida parece un reto, porque el exterior se empeña en distraernos de lo que es vital: de nosotros mismos y, por lo tanto, de los demás.
No olvides que pedir ayuda y ayudar son dos regalos que también nos damos a nosotros mismos, cada quien desde sus propios talentos y capacidades.
Con mucho agradecimiento a Se Balance por colaborar en la salud física, mental y emocional, aquí les dejo la fábula que surgió de aquella tarea:
La libélula y el lobo
La libélula bebía agua en la cascada, ligera y feliz, como cada mañana.
Era abril.
Al levantar la vista y observar más allá, vio a un lobo a punto de saltar al vacío, con quién sabe qué intención. Desde donde ella estaba, podía asegurar que no sobreviviría.
—¿Qué podía hacer?— pensó.
Intentó llegar antes de que saltara, pero no lo logró. Voló queriendo acompañar la caída del lobo, pero él descendía demasiado rápido, mucho más pesado que ella.
Cuando el lobo se estrelló contra el agua y no volvió a salir a la superficie, la libélula, cansada, se posó en una rama del primer árbol que encontró. Estaba triste por no haber podido hacer nada útil, por ser tan pequeña, tan frágil.
En ese momento, entre la bruma, observó la imagen del lobo diciéndole:
—Gracias. Nunca nadie me había acompañado tanto.
Y ahí lo entendió:
siempre que ayudas, te ayudas también.
