Sin duda los diagnósticos más devastadores en la medicina actual son aquellos que se relacionan con la palabra cáncer en cualquiera de sus formas.  Quien lo recibe experimenta alteraciones importantes a nivel personal, así como en el entorno familiar, profesional y social en lapsos que pueden ir de horas a días. 

No es para menos, el cáncer es la tercera causa de muerte a nivel mundial; los cánceres que causan mayor número de muertes cada año son los de pulmón, hígado, estómago, colon y mama. De estos cinco, 3 ocurren en el aparato digestivo.

El cáncer de colon es una enfermedad que, desafortunadamente, va en aumento; en el 2018 se calcula que hubo 18 millones de casos nuevos y 9.6 millones de muertes a nivel mundial. La Laguna de Coahuila y Durango no es ajena a este incremento, con 21 casos en 2013 elevándose a 36 casos en 2017, con cerca de 10% de esos casos en personas menores de 45 años (análisis epidemiológico realizado por alumnos de la Facultad de Medicina de Torreón en un hospital privado y clínicas del IMSS).

¿Por qué si la medicina moderna cuenta con tantos recursos moleculares y de imagen no podemos modificar esta tendencia?

La respuesta es tan sencilla como frustrante: llegamos muy tarde al diagnóstico y esto ocurre porque estamos fallando en la prevención. Treinta por ciento de las muertes por cáncer se deben a 5 factores principales:

• Obesidad
• Bajo consumo de frutas y verduras
• Sedentarismo
• Tabaco
• Alcohol

¿Cómo se puede prevenir el cáncer de colon?

El cáncer de colon es de los cánceres con mayor información genética disponible. Se conocen los genes afectados y la secuencia en la que se van dañando estos genes para desarrollar los cambios que dan lugar al cáncer.

Sabiendo esto, es lógico suponer que haya personas que tienen mayor riesgo de tener cáncer de colon que otras. Si estas personas que tienen la información o susceptibilidad genética, ante lo que no se puede hacer nada, se someten a un estilo de vida que favorezca que estos genes “despierten” de su letargo, pueden iniciar los cambios celulares en dirección al cáncer. Hacerte una prueba de DNA para ver si tienes riesgo solamente te confirma, a gritos, que debes poner cuidado en la prevención. Actualmente y para el futuro, la mejor forma de prevenir el cáncer de colon es tener una alimentación saludable.

La genética carga el arma, el estilo de vida la dispara.

Principales factores de riesgo para desarrollar Cáncer de Colon:

• Edad mayor a 50 años (en 2019 Estados Unidos disminuyó la edad para buscarlo a 45 años).

• Que lo tenga o lo haya tenido un Familiar de primer grado (Papá, mamá, hermanos, etc).

• Presencia de pólipos adenomatosos en el colon.

• Enfermedades con inflamación crónica del colon (Colitis ulcerativa, enfermedad de Crohn, Síndrome de Lynch, etc)

• Estilo de vida (Alcohol, tabaco, obesidad, baja ingesta de fibra, sedentarismo, etc.)

La cultura popular irresponsable y las fobias que se tienen con respecto a la búsqueda de lesiones precursoras o de cánceres tempranos en el colon es el principal obstáculo para que la población en general se realice el estudio de búsqueda más eficiente: la colonoscopia. Este estudio endoscópico es el que tiene mayor posibilidad de encontrar lesiones muy tempranas y pequeñas e incluso extirparlas para curar (sí, para curar) el cáncer de cólon. Es mucho más eficiente que una radiografía, una tomografía o una resonancia magnética, ya que no sólo permite hacer el diagnóstico sino también permite el tratamiento. Si bien es cierto que una colonoscopia no está libre de complicaciones (la más temida es la perforación que idealmente ocurre en uno de cada 2,000 estudios), el paciente puede reducir el riesgo eligiendo el mejor lugar posible, con un equipo endoscópico de alta calidad y a un médico con experiencia para realizarla. El costo vale la pena ya que no se va a realizar cada año; un estudio normal le ofrece al menos de 8 a 10 años de tranquilidad para cáncer de colon.

¿Cómo elegir el mejor escenario para una Colonoscopia?

• Endoscopista entrenado, certificado y con experiencia

• Equipo endoscópico de alta definición con filtros ópticos

• Sala de endoscopia con equipo para vigilancia cardiaca, respiratoria y con todo lo necesario para realizar procedimientos terapéuticos y atender cualquier posible complicación (difícilmente un consultorio tiene todos estos elementos disponibles al mismo tiempo).

No debemos tener miedo al cáncer de colon. No debemos tener miedo a buscarnos un cáncer de colon. No debemos tener miedo a una colonoscopia.

Debemos tener miedo a no hacer nada y llegar tarde a algo que pudimos evitar. En este mes de tomar conciencia del cáncer de colon a nivel mundial, toma tu decisión y regálate años de tranquilidad y salud.