Es una realidad que el ser humano no está acostumbrado a no salir de su casa durante tanto tiempo, por lo que es altamente probable que algunas personas aumenten sus niveles de ansiedad. 

Una de las recomendaciones que más se han ofrecido en torno a este tema es que las personas que estén en cuarentena preventiva u obligatoria, mantengan una rutina todos los días, desde la hora en que se levantan, el trabajo que se realiza en casa, la actividad física y los horarios de alimentación. Son demasiadas horas las que las personas pasan en casa y con frecuencia esto llega a provocar que las personas coman más de lo que en realidad necesitan.

Dentro de las recomendaciones en torno a la alimentación, además de la rutina algo que puede ayudar es el practicar la alimentación consciente o mindful eating. El mindful eating o alimentación consciente no es ningún tipo de dieta, es una tendencia que tiene su origen en el mindfulness o consciencia plena. El objetivo de la alimentación consciente es ayudar a las personas a establecer una relación sana con la comida alejada del control del peso y las dietas.

Se pretende que la persona pueda ser consciente de las sensaciones fisiológicas y emocionales, es decir, aprender a sentir y reconocer cuándo debemos comer por hambre o necesidad, y saber detectar cuándo estamos saciados, cuándo nuestro cuerpo ya no necesita más alimento. Diferenciar si el hambre tiene origen fisiológico o psicológico.

A continuación te presento algunas de las recomendaciones para poner en práctica la alimentación consciente:

• Trata de comer sentado, si te paras frente al refrigerador o te paseas comiendo no ayuda a estar atento en lo que se está ingiriendo.

• Come en un lugar tranquilo, el ruido puede provocar consumir alimentos de manera excesiva.

• Sirve en un plato, no comas directo de la caja o bolsa, de esta manera también te podrás dar cuenta de la cantidad de lo que vas a comer.

• Procura no comer frente al televisor, computadora y cualquier otra pantalla.

• Mastica despacio y alrededor de 30 veces cada bocado.

• Practica comer con cubierto y dejarlo en el plato después de cada bocado.

• Bebe agua antes de comer, contribuye a reducir la ansiedad y a aumentar la sensación de saciedad.

• Saborea cada bocado, utiliza tus sentidos al estar comiendo, disfruta la comida.

• Come variado y balanceado.

• No comas si no tienes hambre.

• Si te sientes satisfecho, deja comida en el plato.