Ya sea que te levantes de madrugada o un poco más tarde, hay algunas cosas que tu cuerpo requiere para comenzar labores y que harán tu día más eficiente y productivo.
- Los 5 minutos extra para dormir.
¿Crees que esos 5 minutos extra van a energizarte al iniciar tu día? Falso. Lo recomendable es que cuando suene tu despertador te levantes. Cuando lo apagas ya te despertaste y si vuelves a dormir, tu cerebro comienza un ciclo nuevo de sueño, el cual dura entre 75 y 90 minutos para completarse, mismo que tu lo interrumpes cuando vuelve a sonar tu despertador después de decidir tomar esos minutos extras ¿Haz sentido esa pesadez al despertarte después de esos 5, 10 o 15 minutos después de apagar tu despertador? Esa sensación dura aproximadamente 4 horas para que desaparezca. Así que la próxima vez que quieras tomar esos 5 minutos extras recuerda cómo te sentirás después.
- Quedarte en la oscuridad.
Resulta muy tentador quedarnos con el cuarto a oscuras por la mañana, pero no lo hagas. Es muy importante que nos de la luz del día por la mañana, esto es un factor muy que determina la calidad de sueño que tendrás por la noche. La luz del día nos ayuda estimular las hormonas que regulan nuestra energía durante el día y nuestro sueño por la noche, aparte que la luz del sol nos ayuda a producir vitamina D, importante en fortalecer nuestro sistema inmune, nos ayuda a pensar mejor e incluso a estar más felices, así que abre las cortinas y ventanas de tu cuarto por la mañana y comienza tu nuevo día.
- Levantarte rápido de la cama.
Cuando estas acostado y te levantas de repente, la gravedad manda sangre apresuradamente a tus piernas , lo cual puede bajar tu presión sanguínea rápidamente y hacerte sentir un poco mareado, incluso puedes llegar al desmayo. Lo recomendable es sentarse en la cama y hacer una pausa para darle unos segundos a tu cuerpo a que se acomode, especialmente si has experimentado algún episodio parecido en el pasado. Estos es una precaución muy fácil para evitar alguna caída seria.
- Tomar tu celular y checar redes sociales o emails.
Si eres de esas personas que constantemente checan sus dispositivos, redes sociales o emails, se pudiera estar gestando ansiedad y estrés desde que te levantas. Puedes estar, por ejemplo, creando ansiedad y presión por comenzar a trabajar si lo primero que haces es revisar tus emails. Tómate y regálate un tiempo por la mañana para seguir desconectado del mundo digital y conectarte contigo.
Puedes hacer journaling, meditación, diario de gratitud, o simplemente alguna técnica que te conecte tu cuerpo con tu corazón para comenzar tu día con alguna intención. Puede costarte un poco de esfuerzo al principio pero te aseguro que te hará más feliz y muy probablemente puedas hacer mejor tu trabajo desde este estado mas neutro.
- Comenzar tu día sin un plan.
Si comienzas tu día sin siquiera algún pensamiento de que harás o para qué haces lo que haces, puede que estés perdiendo de vista lo que quieres lograr y el significado que tiene lo que haces. Sea lo que sea, trabajo, familia o estilo de vida, es importante que tengas idea de lo que es importante para ti, y de hacer algo cada día que alimente o te lleve ahí.
Haz una lista de prioridades y proponte acciones diarias, definidas y pequeñas, y checa tu progreso al finalizar tu día. Festeja tus logros, esto te dará motivación y sentido de satisfacción. Si por el contrario no hiciste nada de lo que te propusiste, entonces divide aún mas las acciones en cosas mas sencillas, esto es solo información para definir el ritmo en el que puedes avanzar, no te decepciones y comienza al día siguiente.